¿EN QUÉ CONSISTE?
Todas las carrocerías de la planta de Almussafes pasan por un túnel de inspección formado por arcos de luz y dotado de cámaras de visión artificial. Los arcos de luz realizan un barrido sobre la carrocería mientras las cámaras recogen imágenes que después son procesadas y enviadas a una base de datos. Esto es realizado a carrocería parada, y en tiempos de ciclo globales inferiores a los 30 segundos. Tal es la sensibilidad del sistema que es capaz de identificar defectos inferiores a un milímetro, e incluso defectos casi imperceptibles para una persona. Cuando el vehículo llega a las líneas de pulido, los defectos detectados son mostrados a los operarios, con su localización en la carrocería y clasificados según su tipología mediante un código de colores, en unas pantallas que muestran los distintos planos del coche: capó, techo, portón, puertas, etc-. De esa manera se indica directamente al operario donde está el defecto, para su eliminación, o si no se puede eliminar en la línea de pulido, se manda a reparar. “Este sistema asegura que el defecto siempre sea detectado”, explica Pepe Asensio, Gerente de la planta de Pinturas de Almussafes, “es un sistema fiable, totalmente flexible e inteligente. Y gracias a su base de datos nos permite obtener estadísticas de la problemática de cada una de las estaciones de pulido, para su análisis, e incluso lanzar alarmas, por ejemplo en caso de que se repita el mismo defecto varias veces, para poder buscar la causa raíz y eliminarla”.
MEJORAS INTEGRALES
Con este sistema no sólo se ha ganado en calidad del producto, sino también en ergonomía, salud y seguridad en los puestos de trabajo, y en eficiencia. Las reclamaciones de los clientes por suciedades de pinturas se han reducido a cero, y por tanto, la percepción del cliente sobre la calidad del producto es mayor, con los beneficios que ello conlleva para la compañía. Además los operarios ya no están sometidos al estrés, la fatiga visual y al desgaste que supone localizar defecto tras defecto manualmente, sobre diferentes colores de pintura, y en un tiempo de ciclo concreto. Para Pepe Asensio “tecnológicamente es un sistema muy importante, porque de alguna manera hemos conseguido resolver uno de los mayores problemas que tienen las plantas de Pintura en el mundo. Obviamente, no es un sistema que elimine la causa raíz, pero permite contener el problema y después ir hacia atrás para atajar la raíz del mismo. Además ha redundado en una mejora de la salud para los operarios al cambiar su modo de trabajo, y tiene mucho potencial de desarrollo para otras áreas, como Prensas (detección de pequeños granos), en las cuáles estamos trabajando ahora”.
Fuente: Revista @Ford Europa NOV 2012